Pesadilla en Elm Street es una película estadounidense de terror sobrenatural de 1984 escrita y dirigida por Wes Craven y producida por Robert Shaye. Es la primera entrega de la franquicia Pesadilla en Elm Street y está protagonizada por Heather Langenkamp, John Saxon, Ronee Blakley, Robert Englund como Freddy Krueger, y Johnny Depp en su debut cinematográfico.
Craven rodó Pesadilla en Elm Street con un presupuesto estimado de 1,1 millones de dólares. La película se estrenó el 9 de noviembre de 1984 y recaudó 57 millones de dólares en todo el mundo Pesadilla en Elm Street recibió muy buenas críticas y está considerada como una de las mejores películas de terror de la historia, dando lugar a una franquicia que consta de seis secuelas, una serie de televisión, un cruce con Viernes 13, otros productos de merchandising y un remake del mismo nombre. Aparte de Stunts, Polyester y Alone in the Dark, fue una de las primeras películas producidas por New Line Cinema, que en ese momento se dedicaba principalmente a la distribución de películas, lo que llevó a la empresa a convertirse en un exitoso estudio cinematográfico hasta 2008 e incluso recibió el apodo de «The House that Freddy Built».
A la película se le atribuye el uso de muchos estereotipos encontrados en las películas de terror de bajo presupuesto de los años 70 y 80 que se originaron con Halloween (1978) de John Carpenter. La película incluye un juego de moralidad en el que los adolescentes sexualmente promiscuos son asesinados. Los críticos e historiadores del cine afirman que la premisa de la película es la lucha por definir la distinción entre los sueños y la realidad, manifestada por las vidas y los sueños de los adolescentes en la película. Los críticos posteriores elogian la capacidad de la película para transgredir «los límites entre lo imaginario y lo real», jugando con las percepciones del público. La película fue seguida por A Nightmare on Elm Street 2: Freddy’s Revenge.
En 2021, la película fue seleccionada para su conservación en el Registro Nacional de Películas de Estados Unidos por la Biblioteca del Congreso por ser «cultural, histórica o estéticamente significativa».
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