El Ralph Baer Memorial es una estatua que se sitúa frente a un río en Manchester, New Hampshire, la misma honra al inventor de los videojuegos. Ralph Henry Baer, hombre nacido en Alemania que creó el primer sistema comercial de videojuegos llamado Magnavox Odissey. Baer fue honrado con una plaza que lleva su nombre y en ella se encuentra una estatua que honra su vida, la misma se en encuentra en la ciudad donde vivió y murió en 2014.

¿Quién fue y qué hizo Ralph Baer?

Ralph Baer estaba sentado en un banco, esperando el autobús, el 1 de septiembre de 1966 cuando se le ocurrió una idea: la gente debería poder usar las pantallas de sus televisores para jugar. Su control llamado «caja marrón» se convertiría en el prototipo original de gran parte de los videojuegos modernos.

Su familia era de ascendencia judía que vivía en Alemania durante el ascenso de Adolf Hitler, los Baers llegaron a los Estados Unidos en 1938 en busca de refugio de los nazis. Ralph Baer sirvió en el ejército de los EE. UU. durante la Segunda Guerra Mundial y luego pasó su carrera como ingeniero en Sander’s Associates, un contratista de defensa en Nashua. Allí, tuvo una idea que cambiaría a toda la sociedad no solo de su generación sino de las generaciones futuras, la idea era que los televisores podrían usarse de forma interactiva para jugar juegos electrónicos.

En 1968, Baer creó el «Brown Box«, un dispositivo que permitía la interactividad entre un usuario y las imágenes en una pantalla de TV. El primer sistema de videojuegos multijugador y multiprograma, el «Box», vino con juegos tales como ping-pong (mismo que sirvió para la inspiración del «Pong» de Atari), fútbol, tiro al blanco y damas. El prototipo fue licenciado por Magnavox en 1972 y comercializado como Magnavox Odyssey Home Video Game System, el primer videojuego comercializado en el mundo. Allanó el camino para la industria de los juegos que posteriormente ha generado miles de empleos y a su vez millonarias ganancias para sus inversores y trabajadores, por ello Baer es conocido hoy como el padre de los videojuegos.

Baer fue un inventor prolífico acreditado con muchas creaciones más allá de la Odyssey, incluido el popular juego interactivo Simon que llegó a las tiendas en 1978, en el juego los jugadores tenían que combinar los sonidos y las luces mostradas por el dispositivo para lograr avanzar por medio de la repetición. Si eres fanático de los videojuegos, la próxima vez que estés en Manchester, pasa por Baer Square, siéntate en el banco junto a la estatua con vistas al río Merrimack y tómate un momento para agradecer al hombre que inventó el videojuego moderno.

Dato importante a saber antes de realizar la visita

La estatua se encuentra en Baer Square, en Arms Park, en el centro de Manchester. El parque está abierto todos los días de 6 a.m. a 11 p.m.

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